Los extras están muy bien cuando son extras. Cuando por paginación o para completar el impar de un cuaderno se metían introducciones, artículos, incluso publicidad si la hubiese. Esos extras Iban incluido en el precio de tu comic porque técnicamente tenía que ser 24, 32, 64, 96 páginas... y no te iban a cobrar más ni menos, mejor que poner páginas en blanco o en negro poner un texto o un pin-up o una portada variante. Conviertes un producto normal en uno excelente sin añadir coste al consumidor.
Pero cuando se mete a lo loco para aumentar la paginación y vender más caro, dejan de ser extras y se convierten en relleno, abusando hasta el caso de llegar a tener más relleno que cómic para seguir sangrando al comprador.
A la gente le gustan los donuts normales, a 1€ están muy buenos. Si van con chocolate cuestan 1,20€, pues vale, están mejor y no son mucho más caros. Si van rellenos y cuestan 2€ pueden estar interesantes pero empiezan a ser empalagosos y caros. Pero cuando los hacen gigantes con cobertura de chocolate blanco, doble relleno de chocolate y dulce de leche, toppings de tres chocolates, nubes de azúcar y galleta lotus pueden seguir estando buenos pero son incomestibles, son postureo para la foto por la que te cobran 6€. Pues con los comics es lo mismo, extras y superediciones nos gustan, pero son postureo con el que nos clavan.
Ahora me voy. que me ha entrado ganas de tomarme un café con donut y leer un tebeo.