Hay una frase a partir de la cual la película se va a pique:
"Esto es de locos"Sí, Harada, hijo, sí.
Porque hasta entonces Lobezno Inmortal estaba siendo una película realmente entretenida, con buenos personajes, acción bien rodada y más que decentemente narrada. Pero a partir de esa frase, el final de la película se desmorona hasta arruinar todo lo conseguido en una frase lapidaria de héroe de acción que acaba con un malo sin motivos, en una trama completamente enredada y sin lógica alguna.
Pero centrémonos en lo bueno:
Los personajes molan. Molan mucho. Desde un gran Shingen, a una intensa Víbora, un convincente Harada, una preciosa Mariko y la mejor interpretación de Jackman en la piel de Lobezno hasta ahora. Al menos no se limita a gruñidos. Creo que es el lobezno más expresivo que hemos visto hasta ahora, lo cual es de agradecer.
Las escenas de acción son MUY buenas. Gran película de aventuras, con buena coreografía y bastante ingenio. Además, todo está hecho de forma bastante artesanal y no canta en exceso el ordenador. La escena del funeral es mi favorita, pero la de Mariko/Shingen/Logan también me gusta mucho. En general, grandes escenas de acción, largas, extensas y preparadas, que dejan buen sabor de boca. La del tren también me gustó mucho, y eso que en el trailer se veía irreal. En la peli mejora mucho.
La ambientación. El comienzo es bastante bueno. Tokyo está muy bien retratado. El aire futurista y clásico bien captado. Me gusta bastante el tono de la película, y la forma en que consigue un producto uniforme.
Como he dicho, esto es entretenimiento puro; no hay grandilocuencia, ni afán de trascender, ni ínfulas morales. Acción pura, lo cual no está mal de vez en cuando, que ya hay bastante con Nolan y Snyder jugando a emularle.
En fin, no es una mala película. De haber subsanado ese final sin sentido, que anula la premisa y trama, podría haber llegado a darle un 7,5 incluso. Pero teniéndolo todo en cuenta, creo que se queda más cercana al
6,5.
No es una mala película, ni creo que haya sido un fracaso o una decepción generalizada.
Simplemente, un producto del verano, del montón, que entretiene sin más.
No me ha disgustado.