Termina el Anexo de los Olímpicos... de momento
Me explico: Todo lo que hemos visto en estas dos primeras partes del Anexo ocurre antes del próximo Capítulo (esto es, el XIV), en la ubicación que cada uno quiera concederle. El acontecimiento límite es el establecimiento del panteón de dioses que en dicho capítulo comenzará a actuar en la Tierra. Cuando lleguemos a otro Capítulo con un acontecimiento límite seguiremos explorando el mundo de la mitología olímpica.
ANEXO: LOS OLÍMPICOS (II)
La estirpe de Zeus.
A lo largo de los siglos, los dioses generan más y más descendientes que pueblan el Olimpo y sus alrededores.
Zeus concibe un amplio número de descendientes tanto con Hera como con otras diosas o mujeres mortales, que comprende nuevos dioses, semidioses o mortales.
Zeus y Hera conciben a Ares, dios de carácter belicoso que pronto comienza a sentir admiración por el arte de la lucha y la guerra.
Zeus y Hera conciben a Hefesto, que nace jorobado y con diversas malformaciones. Apenas unos minutos tras su nacimiento, Hera decide exiliarlo del Olimpo debido a estas taras, y lo envía al mundo de los mortales. Allí, una ninfa del mar llamada Tetis le acoge y le cría.
Zeus y Hera conciben a dos hijas llamadas Hebe y Bellona.
Zeus se une a la titán Temis, con la cual concibe a tres hijas llamadas Cloto, Átropos y Láquesis. Con el tiempo las tres desarrollan habilidades mágicas y se hacen llamar las Moiras, capaces de congelar el tiempo a su antojo y ver todos los acontecimientos futuros.
Zeus se une a la diosa Leto, quién queda encinta de mellizos.
Hera descubre la infidelidad de su esposo y colérica ordena a Leto que abandone el Olimpo y de a luz en la tierra de los mortales.
Una vez en la Tierra, Leto da a luz a un niño y una niña, a quienes llama Apolo y Artemisa.
Zeus y la diosa Maia conciben un hijo al que llaman Hermes. Según alcanza la madurez, Hermes demuestra ser el dios olímpico capaz de desplazarse a mayores velocidades.
Zeus se une a Eurínome y conciben una hija llamada Joya.
Zeus se une a Mnemósine y conciben una hija llamada Urania.
Zeus y la diosa Dione conciben una hija a la que llaman Afrodita.
Zeus se une a Demeter, su hermana, y conciben una hija llamada Perséfone.
Convertidos ya en adultos, Artemisa y Apolo son llamados por su padre para habitar en el olimpo como dioses. Durante su estancia en la Tierra Apolo se ha convertido en un maestro del arco y la música, mientras que Artemisa es una experta cazadora de cualquier bestia.
Zeus se una a la titán Metis, tras lo cual las Moiras le anuncian que la hija que nacerá de su vientre será incluso más formidable que él. Temiendo correr el mismo que detino que su abuelo y el que él mismo procuró a su padre, Zeus decide engullir a la titán embarazada.
Nueve meses más tarde, Zeus comienza a sufrir terribles migrañas. Desesperado, acude a su hijo Hefesto, quién confecciona un hacha capaz de librarle del dolor. Hefesto golpea la cabeza de su padre con el hacha, y de la herida surge la hija de Zeus y Metis ya en estado adulto. La muchacha recibe el nombre de Atenea.
Ya adulto, Hefesto comienza a trabajar como herrero en una gruta submarina, creando armas y utensilios formidables. Sorprendida de los logros de su hijo, Hera se arrepiente de sus actos y le ofrece vivir en el Olimpo junto a ella y su padre, empleando sus habilidades para sus congéneres.
Afrodita crece convirtiéndose en la más hermosa de todas las diosas, además de desarrollar habilidades místicas que le permiten controlar el amor y la pasión de otros seres.
Temiendo que se produzcan reyertas entre dioses aspirantes a la mano de Afrodita, Zeus y Hera ordenan que se case con Hefesto, en parte como compensación al exilio previo de este.
A pesar de las reticencias de Afrodita, que repudia de la deformidad de Hefesto, el matrimonio se lleva a cabo presidido por el propio Zeus.
Plutón se enamora de la ya adulta Perséfone y pide a Zeus que le deje desposarla, ante la negativa de Demeter.
Para convencer a Zeus, Plutón diseña un nuevo rayo y se lo regala. Complacido, Zeus da su beneplácito, pero le sugiere a su hermano que rapte a su amada, puesto que Demeter jamás le concederá permiso para casarse con ella. Plutón secuestra a Perséfone y huye con ella al Hades.
Hécate, una de las titanes supervivientes, descubre la verdad sobre el paradero de Perséfone y decide contárselo a Demeter, al estar enamorada del propio Plutón. Descubierta la verdad, Demeter reclama una solución a Zeus, que dictamina que Perséfone deberá pasar una misma cantidad de tiempo con su esposo en el Tártaro y en el Olimpo con su madre.
El panteón
Zeus decide establecer un alto consejo de dioses al que denomina Panteón, compuesto por él mismo, su esposa Hera, y sus hijos Afrodita, Apolo, Ares, Artemisa, Atenea, Hefesto y Hermes.