Quería reservarme el primer comentario para hacer esto… ¡Pero tenía que denfender al Doctor Muerte, y al final con la diatriba se me ha ido la p*ta olla! Así que me reservo el cuarto comentario, que es igualmente simbólico…
Hace cosa de un año me planteé leerme toda la run completa de los 4 Fantásticos. Las razones, obviamente, que son mi grupo de superhéroes favorito y no me podía resistir a hacer una lectura de toda su evolución histórica. Ya antes de que empezase había algunos momentos que me habían marcado de chaval, pero gracias a este recorrido me he encontrado más cómics buenísimos… y otros que no tanto.
Ha sido una lectura larga, costosa, y lenta. Algunas etapas me han gustado mucho y me las he pillado en físico hace nada, otras me han quitado las ganas de leer durante meses. Rastreando mercadillos, segunda mano, tiendas, FNACs, y ferias he conseguido hacerme con una modesta biblioteca basada en el grupo, que no llegará a la altura de la de muchos coleccionistas avezados, pero ello no significa que no deje de enorgullecerme, porque tengo lo que más me gusta, y donde más me gusta (bueno, menos los omnigolds, esos tienen que caer poco a poco…)
Supongo que cuando me ponga ahora a hablar sobre mis etapas favoritas y odiadas suscitaré muchas quejas, y a esto digo que no estoy intentando crear una escuela, ni ningún dogma. Lo que voy a hacer va a ser listar mis gustos personalesque he intentado en todo momento que se basen en mis propias querencias, sin apenas influencia ajena (no lo he conseguido). Lamentablemente le tengo cierto cariño al uso de los paréntesis (¡No, no soy RAY!, malpensaos!)
Para ordenarlo un poco, lo pondré en tres categorías, de mayor a menor en cuanto a gustos personales. Aunque hay algunas colecciones ligadas a los 4 Fantásticos de las que me gustaría hablar en un apartadito especial. Y aviso de nuevo de que esto va según gustos personales, o sea, a lo mejor me lento mañana con el pie izquierdo y decido que la etapa de Wolfman es más cojonuda que mear con los brazos en el suelo (Aviso: no va a pasar) Categorizaré por autores porque, por mucho que nos gusten los personajes, al final son los creadores los que les dan vida para que puedan desarrollar buenas o malas historias.
LA CREME DE LA CREME [/b]
Lee/Kirby (1-103): Sí, lo siento, lo típico, nada nuevo bajo el sol para cualquiera familiarizado con Marvel. Y es que para mí la Edad Dorada de esta etapa es uno de los cómics que más marcó cuando lo leí de pequeño a través de la Colección “Grandes héroes del cómic”. No conocía a Jack Kirby, pero ya sabía que esas viñetas cargadas de espectacularidad eran totalmente diferentes a los otros cómics que se editaban en la línea, y a todo lo que tenía en mi propia estantería ya de paso. Temblé de emoción cuando Muerte le robó los poderes a Estela, mi culo se removió frente el sonido del primer grito de Rayo Negro, me estremecía de emoción saber qué misterio se escondía dentro de la Colmena. Stan Lee y Jack Kirby inauguraron la Silver Age con el cómic de aventuras más perfecto que jamás se haya creado. Ni Watchmen, ni Animal Man, ni porras, todo lo que se le puede pedir a un cómic de superhéroes y más está en las páginas de esta etapa. Y no solo me refiero a la Edad Dorada, pues no olvido la importancia de las primeras historias creadas por el dúo que también podían llegar a ser bastante impresionantes y le sirvieron a Kirby para depurar su método. Por no hablar del a recta final a partir del 67, de la que destaco sobre todo esa aventura pulp en la misteriosa Latveria, junto al impresionante crossover con Daredevil que me hizo preocuparme por la suerte del cuernecitos mucho antes de saber quién era Frank Miller. Sí, ya sé que son cómics viejos, pero yo solo encuentro dos cosas anticuadas aquí: la obsesión de Stan Lee con los comunistas, y la obsesión de Stan Lee con las mujeres. Susan siemrpe acobardada por algo, limpiando, o comprando, pero al menos llegó a tener sus momentos. Y oye, era una mujer que participaba en un cómic de aventuras dentro del equipo más importante de la editorial, eso ya es bastante más de lo que puedo decir de otros cómics de la Silver Age como Tintín, Astérix, o Lucky Luke. ¡Y ya me he desviado del tema! Amos, que los 4 Fantásticos de Stan Lee y Jack Kirby son lo mejor de lo mejor en el mundillo. Después de ellos, ni la cabecera ni el cómic de superhéroes en general han vuelto a ser lo mismo.
John Byrne (232-293): Bah, ya sabrán muchos qué diría yo de esta etapa. Después de catástrofes varias (ahora volveré sobre ello) la llegada de John Byrne la recibí como oro en paño. Se nota mucho que Byrne era fan, porque no de los principales puntos de interés de esta etapa es ver como Byrne juega con los diferentes personajes aparecidos en la etapa de Lee/Kirby, como juega con la continuidad para hacer grandes historias, sea para volver al status anterior. Byrne tenía las ideas claras sobre cómo llevar al cuarteto, y no debió de hacerlo tan mal en sus maniobras argumentales si hoy en día siguen habiendo fans que consideran a Hulka el “miembro invisible” de los 4 Fantásticos. Para mí esta época representa a Byrne en la cumbre de su carrera, tanto en dibujo como en guión, mucho antes de acabar en Superman. Lo mejorcito: el viaje de los 4F a la Zona Negativa, con todos esos mundos misteriosos donde no sabes que va a pasar, mientras Annihilus la lía parda, y los Vengadores quedan como unos pringaos… yo en cuanto leí la saga sabía que ASÍ es como debería ser siempre el cuarteto, investigando y descubriendo cosas nuevas. Si alguien demostró que los 4 fantásticos podían ser actualizados, yo creo y sé que ese fue John Byrne
Walter Simonson(334-354): A mí me parece una de las etapas más infravaloradas del cómic de aquí a este lado del charco. Al contrario que con su trabajo en Thor, aquí Simonson entraba con la larga sombra de Byrne detrás, y lo que hizo fue ir hacia el lado más desenfadado de las historietas, llevando a los 4F por nuevos rumbos, sacándoles de su “hábitat natural” para pdoer jugar con nuevos ambientes. Me llama la atención esta etapa porque Simonson reivindica que la personalidad de Ben no se limita solo a su apariencia monstruosa, y me gusta porque otros autores cuando devuelven la humanidad a Ben lo suelen convertir en un tío emo amargado con su vida. El Ben de Simonson por el contrario es tan dicharachero y mal hablado como su versión de la Cosa y eso es loable. Por ahí andan los “New-Fantastic Four”, pero yo me quedo sin duda con el 350-352, por todo lo que supone para el Doctor Muerte el hecho de señalar que todas las apariciones del Doctor Muerte han sido falsas, mediante la lógica del gusto personal para quedarte con las “verdaderas”. Si hubiese durado tan siquiera 10 números más, yo no dudo que esta etapa hubiese llegado aun más y más lejos.
El Hickman/un puñado de dibujantes(570-588 600-611, FF 1-23) : Ya he dicho que esto sería por elecciones personales. Sé que hay mucha gente qu odia esta etapa, pero a mí me ha divertido bastante… y en realidad no tengo más argumentos que ese para justificarme. Me gusta ver la profesionalidad con la que Hickman se tomó la historia (y mira que le cogí manía a sus New Avengers), pero sé que si hubiese leído mes a mes todo habría acabado desesperándome. Y es que yo creo que a Hickman no le sienta bien en realidad el decompresive storytelling. Su etapa se disfrutaría más con algún bocadillo de pensamiento por ahí, alguna explicación larga por allá, o conversaciones más largas entre personajes. Y también que Hickman no acaba tratando temas que me gustaría que hubiese tratado más, como toda la sub-trama olvidada de la ciudad de la Antigua Atlantis, por poner un ejemplo, o Muerte peleando contra los Celestiales (WTF como porras sobrevive). Y en la parte artística, demasiados dibujantes, demasiados, y todos con estilos demasiado diferentes, que es lo que más me choca. Si hay que quedarse con tres, me quedaría con Dale Eaglesham, porque es el dibujante más “Kirby” que se pasa por la Primera Familia, y aquel con un estilo más personal de todos los comparsas de Hickman. Luego Bobillo, porque me gusta el estilo indie que aplica a la FF. Y Alan Davies con las portadas, no hace el trabajo de su vida supongo pero junto a las de Epting sus portadas son muy gonicas (aunque a veces no tengan mucho que ver con el contenido y parece que a Alan se la sudaba tres huevos lo que estuviese escribiendo Hickman) Por la parte positiva, yo me quedo con el espectacular arranque, con el Concilio de los Reeds, el cumpleaños de Franklin o la asombrosa saga de las 4 ciudades, y la última etapa, una vez la gran historia está ya terminada. Me da pena porque estoy seguro de que mucha gente abandonó la serie frustrada por la trama principal, y se perdieron algunos de los mejores números ya en su recta final. Y aun sus más férreos detractores tendrán que admitir que trajo muy buenas ideas para la Primera Familia, como el antídoto de Ben, los viajes en el tiempo, el juego con la continuidad, o, como no, la propia FF, que a mí me parece una propuesta cojonudísima para convertir a los 4 efe en una franquicia. Me gusta esta etapa lo suficiente como para que esté reconsiderando empastarla…
AHÍ AHÍ
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Waid/Weiringo(vol 3 60-72, 500-524): Decisión polémica tal vez, dejarlos tan “abajo”. En realidad la etapa me ha gustado mucho, y depende de qué humor esté cada día que a lo mejor me gusta más Hickman o menos Waid… pero en líneas generales, a no ser que le pegue una buena relectura, creo que tampoco me arrepiento de poner aquí esto. Solo el primer número me parece de lo mejorcísimo que se ha hecho con el cuarteto en todo el siglo XXI, por ese monólogo de Reed Richards con Valeria. Por otra parte, no me acaba de gustar mucho el tratamiento que se le da al Doctor Muerte aquí, tan “randomizado”, demasiado simple para mi gusto. Y no hablemos ya del reboot que se le da a la calle Yancy, o de Galactus comiendo hamburguesas. En la parte positiva, Mike Weiringo me parece el artista del siglo XXI que mejor ha sabido entender a estos personajes, y que mejor los ha dibujado. Un artistazo de tomo y lomo. Una pena que nos dejara…
Millar/Hitch: Ala, otra decisión para suscitar polémica, supongo. Por volver a poner a los 4 fantásticos en el punto de mira del público y prepararle el terreno a Hickman en varios puntos (rayos, solo hay que ver el tema del Nu-World) Su etapa aún con su pretencioso aire de “vamos a ser el mejor cómic del mundo” tuvo alguna que otra buena idea, diría yo. Tiene tela que hasta Millar, el autor de Civil War, le mandase recaditos a Extradewhisky por como trató al grupo durante el evento. Lo del Doctor Muerte aun lo puedo perdonar por como acaba retratando la naturaleza obsesiva y persecutoria del villano con el final. Eso sí, lo de la Tía Petunia no tiene perdón de Dios. En otras palabras, si no os gusta Millar esta etapa no ayuda a que te reconcilies con el individuo.
Lee: Bueno, algo de los 70 destacable habrá… y lo único que se me ocurre es la etapa post-Kirby, cuando Su Majestad ha abandonado la cabecera y Stan Lee aún se mantiene en los guiones. No es que sea todo la gran cosa (jejeje) porque Lee ya daba síntomas de agotamiento, pero algún momentazo haberlo haylo.
El 645: Al principio iba a poner la etapa de James Robinson entera… pero es que el arranque es mu malo! La cosa (jejeje) no empieza a arrancar hasta que entramos en Original Sins, y no sé si me gusta que las historias de los 90 de repente y como si nada sean canon. Pero el 645, o mejor dicho, la grapa de Panini, tiene el detallazo de poner una sección dedicada a las portadas favoritas de cada autor. Me sorprende ver por ahí a autores star como Byrne, Wolfman, o Millar hablando de sus portadas favoritas del cuarteto, que por cierto me llama la atención que el único autor en poner na portada de Byrne sea ¡Carlos Pacheco! Como no. Mark Waid dedicando su entrada íntegramente a Mike Weiringo, uf… Y también se me escapa una sonrisita cuando veo en medio de todo este meollo al bueno de Karl Kessel. Marvel nunca te comprende, tío.
“¡LOS CUATRO TERRIBLES!”
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Englehart: Vale, supongo que de todo lo que estoy poniendo por aquí, esta es la “menos mala”. Porque Steve tenía buenas ideas. Convertir el grupo de nuevo en un mar de salseo constante es una buena idea. Meter a la Cosa de líder es una buena idea. Darle un power-up a la Cosa es una buena idea. Lo de los Fantastic Faux es una coña buenísima que aun a día de hoy se ríe en la cara de DeFalco. Luego, entramos en las drogas y ya… aquí os dejo que ver como a Englehart se le va la puta olla es una experiencia, sin duda. A mí nunca me ha divertido mucho reírme de la cutrez sinsentido, pero entiendo que Englehart tiene su público, y eso puedo respetarlo.
Los 70(104-¿220?): Lo siento, no puedo aguantar las aventuras de los 4 Fantásticos en los 70. Me lo leí de golpe, y fue una experiencia agónica, leeeenta, y que me daba rabia y más rabia mientras seguía avanzando con los números. Tramas insulsas de un número, “feminismo” de vergüenza ajena, una trama agónica de un divorcio. Más elementos que me pueden caer mal, como la pesadísima insistencia en repetir una y otra vez la dinámica de que un miembro abandone el grupo para termina amenazando con su disolución, o numerosas apariciones muy t´picas del Doctor Muerte. Me alegro muchísimo de que Panini decida incluir los Ashtonishig Tales en uno de los primeros omnigolds porque eso supone que no tendré que verme moralmente obligado a pillar nada de esta etapa… o como mucho lo de Stan Lee en solitario, y por razones específicas.
Fraction/Bagley(1-16): Meh, un meh rotundo y absoluto. Fraction parece considerar que trabajar en esta cabecera es un trabajo más, algo alimenticio qu no vale su esfuerzo, y que abandonará apenas pase un año. No me extraña que Clemente le dedicase una “carta de amor” en la introducción del segundo tomo de FF. Aunque si le pego una relectura…
DeFalco: No, lo siento, no aguanto a este señor. No se merece que le dedique una parrafada, pero lo haré igualmente. Siguiendo las líneas argumentales, este tío es el culpable de que el grupo dejase de ser “el mejor equipo del mundo” para convertirse en un sucedáneo. DeFalco combina los diálogos más soporíferos de los 60, la pretenciosidad de los 70, lo peor del horterismo de los 80, y los clichés de los 90 para brindarnos una especie de cóctel rarísimo que yo solo recomendaría a aquellos que gusten de las bebidas fuertes, y le tengan un poco de manía a Byrne y a Simonson. Es la única etapa que no he tenido el valor de terminar de leer, pero como la segunda mitad no retome el rumbo lo siento pero yo paso…
En series y mini-series paralelas no me alargo porque hay muchas y no las tengo todas conmigo (Moléculas Inestables no sé de que trata pero sé que LA QUIERO). De lo leído destacaría con mucha fuerza el FF de Allred con toda su locura pop (signfique lo que signifique eso)y apariciones de Muerte destacadas como en Triunfo y Tormento, o en Doomquest. Para pasar a habla de algunas versiones de universos alternativos muy divertidas como la versión malvada en Planetary. Y vaaale, porqué no, esa pseu-última historia de Secret Wars, que no es la panacea pero tampoco está mal. Y no puedo dejar de recomendar las webs "The Great American Novel" y "Fantastic Four Headquarters" que hace lo mismo que he hecho yo, pero con más talento y más análisis concienzudo.
Puede decirse que, si digo que los 4 Fantásticos son mi grupo preferido, a tenor de lo visto es porque debo de tener un poco de sadomasoquista en mi personalidad. Voluntad de querer ver a un grupo entrar en decadencia, pero para mí ha habido lecturas a lo largo de tooodo este run que han hecho que me valiera mucho la pena aventurarme a hacer este recorrido. Y aun en sus peores momentos, seguía siendo una serie donde lo imposible podía pasar, donde cualquier cosa literalmente podía pasarles a los protagonistas.
Me da un poco de lástima, porque he empezado esto con mal pie, con la serie de los 4 Fantásticos cancelada y sin visos de que se vuelva a publicar ahora tendré que buscar el espíritu sci-fi de lo imposible en otras cabeceras, como en Ciencia Oscura, o en Ultimates. Así que, hasta que los 4 Fantásticos vuelvan, seguiré esperando…