Espero que fuera una clase de C2, porque pocas películas recuerdo que vayan a más velocidad que Un, Dos, Tres. Los diálogos se suceden a la velocidad del rayo.
A mí —opinión impopular— me parece de lo más flojito de Wilder.
Que va, un B1, mis compañeros acabaron desesperados, y yo un poco también.
Pero estaba divertida.
En profesor un destalentado, eso sí, eligiendo material.
Aunque en italiano tampoco de quedaban cortos, que nos ponían a Benigni en el A2, en La Tigre e la neve, y también hablaba a toda pastilla.