Es curioso como las declaraciones de Moore parecen atacar de alguna forma al lector veterano y precisamente los que peor se las han tomado en este foro sean los lectores jóvenes mientras los mas veteranos las apoyan o le dan la razón al menos a medias.
Los veteranos (y yo con 15 años de lector hardcore soy un yogurin, que aquí hay mucho viejo de verdad que lleva 30 y 40
) pasamos ya de muchas cosas después de llevar leyendo décadas el mismo género.
A mí los supers plim.
Si algo me gusta lo pillo, si no paso.
No diría que uno con los años se vuelva anti-supers, no hace falta machacar lo pasado. Pero sí que conforme vas leyendo más, entiendes que lo accesorio son las capas, no el medio. Que hay una etapa para cada momento, y que aunque el amor al cómic es eterno, uno puede disfrutar -y debe, y es bueno- de distintas cosas según va madurando como lector y persona.
De ahí que entiendo que las declaraciones de Moore son acertadas, aunque poco finas. Y que aquello de la sensibilidad subnornal, muy mal dicho, pero no desacertado, no anda muy lejos de la verdad.
En su libro,
Julián Clemente también dice algo muy parecido en realidad
El lado oscuro del frikismo: Tíos de 40 años, que viven en casa de los padres, sin pareja conocida, con el cuarto o el sotano lleno de muñecajos, pintas de niño grande, y una completa asocialidad. Esos tíos existen. Y como cualquier cosa llevada al extremo...pues da pena.
Entiendo que Moore se refiere a eso realmente, aunque no acota, y parezca que su discurso lo tire por tierra todo y a todos.
No hay nada malo en el escapismo ni el ocio ligero. Cada uno se entretiene como quiere.
Por eso creo que lo que él decía, va más por quienes no pasan página y viven en unos 15 años infinitos; no leen más que cómics, solo cómics de supers, quieren que todo permanezca igual y que se adapten a su perfil de lector, haciendo crecer a personajes que a lo mejor no van ya dirigidos a gente de su edad (hay supers y supers), y viviendo únicamente dentro de esos tebeos.
No sé si andaré muy equivocado, pero es la impresión que me da.