Pues aprovecho que aún no habéis comentado esta nueva tanda para hacer mi pequeña intervención, que poco voy a decir ya que ha estado estupendamente desgranado cada capítulo por Gatsu y Dahaka
Decir que parece que el inicio no lo tenía muy claro Bru, o a menos es la impresión que me da comparando con otras obras. Creo que los primeros números son un poco de base sin tener claro por qué derroteros tirar. A partir del 4º creo que es cuando empieza a plantar piezas.
Me hace gracia como presenta el origen de los malosos y como cortan el del pringaillo de Pitbull
, aunque no sé porqué, pensaba que era el de Genocidio al principio, de este no han dicho el origen aún, ¿no?
También decir la conveniencia de los poderes de nuestros protagonistas, algo de lo que ya lo sufrimos cuando tuvimos al bueno de Bru en los mutantes
Si Steeleye es un manipulador mental, no vemos que funcione con ninguno
Ni Carver, ni Genocidio... menudo patata de tío. Tampoco quedan claros ni definidos los poderes de Craver, o mejor dicho, los daños que sufre. ¿Si le disparan, se recupera, pero se cura al descargar este dolor en otros? Ni el mismo tiene claro si puede morir en el capítulo de Torbellino, cuando cae desde arriba del edificio. Tampoco queda claro si sufre algún tipo de contra si no descarga el dolor en alguien... ¿puede quedárselo sin consecuencias?
A pesar de todo, vemos que sigue teniendo un código de honor dentro de él y la esperanza de poder salir de esta situación. Esa esperanza a pesar de estar en la más absoluta mierda creo que la muestra siempre bru en sus obras.
Y finalmente el dibujo de Phillips. Es cierto que no es el gran dibujante que tenemos ahora mismo o al menos que yo recuerdo en su Criminal o Fade Out, pero está a un gran nivel. Creo que el colorista no ayuda mucho (Tony Aviña) ya que tiene una gama de colores muy planos y no es Staples ni se le acerca.
A ver con que nos sorprende en los siguientes números.
Decir que estoy leyendo las grapas de Planeta, al igual que Querubo, aunque la segunda temporada la tengo es los tomitos de Norma. Viva Frankenstein