El tomo de Estela Plateada, y lo sabrán quienes hayan visto ya ejemplares, es muy manejable, se abre bien, se puede leer sin problemas y no pesa demasiado. Por eso dije, y lo mantengo, que es un hallazgo de formato, ya que era muy difícil combinar un elevado número de páginas con la manejabilidad y el peso.