Essex te podrías marcar tu top 5 de historias sobre el Joker
(si lo tienes a bien claro! )
Ufff, vaya una misión complicada
Hay tantísimos Jokers...no recuerdo quien dijo que sí eras escritor en Batman, tenías que usar al menos una vez al Joker, y una vez lo usarás, el público sabría si valías para la serie o no.
Te puedo decir que el Joker de
Batman, the animated serie uno de los que tengo en más alta estima, y que es un Joker 100% perfecto, compensado genialmente, y más brillante en su doblaje en español. Un personaje amenazador, psicótico y realmente divertido. Tiene el toque justo de cada faceta. Es un Joker al que no se ve en situaciones extremas, sí, tiene que contenerse debido a la amplitud de público al que va dirigido, pero que nadie dude ni un instante que ese personaje es pura maldad. El Joker de
La máscara del fantasma es uno de sus mejores exponentes.
Siguiendo con Dini
Cuando el hombre lo usa en sus cómics, sabes que conoce al personaje. En parte, ayudó a remodelarlo, a ponerlo a punto. Es el mismo Joker, solo que llega a extremos a los que el de la serie animada solo señalaba, intuyendo sin mostrar. Otra gran historia del Joker, es la de
Mad Love, aunque esté en un segundo plano por culpa de su entusiasta
Harley Queen.
Curiosamente, los Jokers que aparecen en las obras más características del murciélago, no están ni de lejos cerca de los primeros puestos para mí. El de Frank Miller pasa sin pena ni gloria, siendo un añadido, el de Moore, no conserva una característica imperdonable e inadmisible en su ausencia hablando del personaje; el sentido del humor. El Joker de la Broma Asesina es oscuro, grotesco, pero su ingenio es cerebral, sofisticado en el sentido de aséptico, frío. En ningún momento despierta una sonrisa. Es decir; para mí, el Joker debe ser una dualidad de todo lo que hay en el mundo. Risa y llanto, diversión y terror puro, confianza y amoralidad. Que tome la efigie de un personaje que debería hacer reír, ya lo dice todo. El personaje más peligroso del mundo del murciélago es...un payaso. En principio, justo quien parece menos amenazador. Y eso es lo que echo en falta en Moore. El personaje NUNCA rebaja la tensión. No da pulso a las víctimas. Embiste con todo. Y el Joker no es así. El Joker se te acerca sonriendo, te cuenta un chiste realmente malo para que te rías, te pasa la mano por encima del hombro, se gana tu confianza, parece tu amigo, un personaje divertido, amable, hace que te relajes, hace que bajes la guardia, y entonces te apuñala los ojos sin parar de reír para darle forma al gag. Y en realidad para él no ha habido ningún cambio. Todo es parte de la misma broma, y sigue siendo tan cordial contigo como lo era antes, solo que ahora está acuchillándote con una risa histérica. Es brillante en sus planificaciones y su conocimiento de la psique humana, pero sin que esto signifique ni se confunda, con un amaneramiento intelectual. El pura pasión. Y es inteligente sin parecer elitista o estirado; todo lo contrario. Para mí, es la pálida cara de la muerte, tan horrorosa y enferma como sea posible mostrarla, pero sin que deje de resultar divertido el hecho de que todos vayamos a morir. El Comediante es un Joker atemperado. Un personaje que ha visto la locura del mundo, pero se niega a caer en ella aunque la comprenda. Donde el Comediante es cínico, el Joker es surrealista. Donde uno es salvaje, el otro es una fuerza de la naturaleza. Azar, caos. La empatía de la peste, y la conciencia de un huracán. El Joker es amoral porque el universo lo es.
Que Alan Moore, piense que un personaje así puede ser el resultado de la chorrada de origen que escribió, es una osadía. En primer lugar, NADIE llegaría a ese nivel de locura desatada, de distorsión de la realidad, con un simple hecho acaecido en su edad adulta. La tragedia, la deformación del ser humano debió empezar mucho antes. Y ser absoluta. Venga, pensadlo; ¿cuantos dramones de infancia habéis visto para justificar el origen de un personaje que está zumbado o se ha convertido en un monstruo? Ahora pensad en los más horribles, en las vidas más deprimentes y los hechos más trágicos que hayáis presenciado. En el caldo de cultivo más pútrido y envilecedor que podáis imaginar.
Pues ahora multiplicadlo por mil, y os haréis una ligera idea, del cúmulo de verdaderos horrores que debería haber sufrido una persona, para llegar al nivel de trascendencia existencial que posee un personaje como el Joker.
Posiblemente, el sea el personaje más interesante y complejo de la historia del cómic.