El caso es que el Capi tiene grandes etapas. La de Lee-Kirby, la de Lee-Colan, cuando luego entra Romita, la de Engleheart (que a mí no me emociona tanto como a otros, pero que es una etapa a tener en cuenta), la de Stern-Byrne, la de Brubaker, incluso la de Gruenwald tiene momentos que están francamente bien... claro, en medio de todas ésas, la de DeMatteis se queda en poco, en muy poco.
Tampoco ayuda el constante baile de dibujantes, claro. Es lo que tiene tener un dibujante regular tan lento como Mike Zeck.
En fin, que esta etapa en Iron Man hubiera sido de las buenas, pero en el Capi...no. Muy, muy normalita. Y más en una década en la que prácticamente todas las colecciones atraviesan por alguno de sus mejores momentos.