Buenas Essex,
Efectivamente, cuando digo que comparar el cómic de Superman con el manga de Dragon Ball (o la serie, tanto me da), me resulta peregrino, es porqué no creo que el segundo haya influenciadoen el medio tanto como el primero. Que podemos convenir en que los súpers es un subgénero y que en principio las historias de Superman podían pasar por
pulp (con mayores reparos que, por ejemplo, las de Batman, eso sí), pero igualmente, Superman supuso el nacimiento del género o subgénero superheróico, mientras que Dragon Ball no supuso, a nivel creativo, el principio de nada.
Por supuesto, los paralelismos entre Superman y Goku están ahí, como el salvador de otro mundo y todo eso, es innegable, pero no me refería a eso. Como también es innegable la influencia, siquiera a nivel
pop que el kryptoniano debió ejercer en Toriyama, también presente en un sentido más literal y paródico en Dr. Slump, su otra gran obra.
Por generación y situación geográfica, yo fui uno de esos chavales que participó y disfrutó de la locura dragonballiana (tazos, fotocopias, cómics, pósters...) y es una serie a la que tengo en mucha consideración, pero eso no me impide ver los problemas que tiene, y que no son pocos.
Como digo, el primer tercio de la serie es espectacular. Los primeros 13 tomos de la edición Ultimate que ahora edita Planeta. Hasta el combate de Goku contra Piccolo Jr. Ahí tenemos un
turmix de influencias pop sabiamente conjugadas: Superman, King Kong, Drácula, Frankenstein, la Momia, la versión más estética del nazismo, la leyenda dl Rey Mono... en fin, las referencias son interminables. Y sí, a partir de todo esto, Toriyama construyó un universo propio totalmente reconocible.
Y la temática clásica, la búsqueda del objeto, era tan funcional como acertada. La serie era un cóctel de aventuras, romance, comeda, misticismo, ciencia ficción y artes marciales. Goku vivía un viaje iniciático continuo a la conquista de su propio destino.
Y a partir de esa pelea contra Piccolo Jr., ¿Qué quedó de todo esto?
Pues un
battleroyale continuo con excusas argumentales más bien pobretonas y desarrollos poco imaginativos. Quizás la mayor oportunidad perdida fuera la saga de Célula (ese trasunto verde de Freezer) donde, desde luego, había hechuras (viajes en el tiempo, apocalipsis, robótica, distopías) para hacer algo mucho mejor de lo que salió. Intentaría Toriyama regresar al cóctel primigenio, con todo el tema del vigilantismo de Son Gohan, pero de manera ya forzadísima y nada acertada.
Lo del monstruo Buu ni siquiera merece comentario. Toda esa parte, una nada desdeñable quinta parte de la serie total, es metralla pura y absoluta en la que no se salva nada.
Así las cosas, a mí me sale un tercio de la serie muy bueno, un tercio que va de lo aceptable a lo vulgar, y un tercio que va de lo vulgar a lo inadmisible.
Tema influencias: Yo no veo influencias de esa serie en Adolf, Doraemon, Hatori el Ninja, Detective Conan, El Caminante, Xenon o El almanaque de mi padre.
¿En serio crees que ha influenciado al prácticamente 100% del manga?
Saludos.