X-Men 141, aparte de acabar siendo todo un icono, me parece bastante notable por la información que nos da en una sola imagen. Obviamente todos sabemos que ocurre en el interior del cómic por lo que la impresión que uno puede tener se ve alterada al tener dicha información. Si hacemos un ejercicio de abstracción y nos ponemos en la de un lector que sigue la colección en ese momento de un simple vistazo extraemos la situación de varios de los miembros de la colección en el cartel del fondo (incluyendo varias muertes). Las figuras de Lobezno y Kitty muestran 1- peligro inminente y encima desconocido para el lector, lo que invita a leer el cómic cuanto antes; 2- que las figuras han cambiado su status quo: envejecidas, sin uniforme, portando un arma de fuego, ropa parcheada.
Además se unen detalles como las grietas en las letras del título que dan pie a pensar en el desmoronamiento y que pican la curiosidad del lector.
La portada no es redonda, especialmente esa cara de Kitty, pero personalmente me parece sobresaliente. Un 9.