Bueno, yo os puedo comentar mi experiencia, ya que empecé a coleccionar cómics hace relativamente pocos años. De hecho, fue gracias al primer sueldo que gané, el cual no sabía muy bien en qué invertir... Y entonces me acordé de toda aquella habitación de mi primo llena de estanterías y estanterías de grapas y colecciones de Daredevil, Spiderman, los X-Men y demás fauna comiquera, que me fascinaba cada vez que entraba a su cuarto. Y decidí que era la ocasión de probar.
Sin embargo, y puesto que me adentré en este mundillo con una edad algo más elevada de lo que suele ser habitual, comencé por cómics "de adultos", sobre todo línea Vértigo e independientes. Es decir, que llegué al mundo de los superhéroes hace nada, como quien dice, y precisamente alentado por las películas de Batman, Iron Man... De hecho, poco a poco voy metiéndome en el Universo DC, pero todavía soy un casi completo ignorante del Universo Marvel. Es más, quiero ponerme con ello a la de ya (de momento lo estoy haciendo con el coleccionable Ultimate). Y por ello creo que mi opinión puede ser más o menos cercana a la de un lector ocasional, por el simple hecho de que yo todavía sigo siéndolo, en esta materia.
Yo me decanto por los tomos grandes, sin ninguna duda. Y todo por el simple hecho de que, aun siendo un gasto mayor en el momento (que no proporcionalmente), como lector me gusta disfrutar historias íntegras, que me permitan hacerme una idea del personaje y su universo. Un coleccionable es algo bastante más incómodo para un lector ocasional, no sólo porque actúa como un "coitus interruptus" contínuo, sino que precisamente por tratarse de un lector ocasional, lo que quiere es, en un principio, comprar "ocasionalmente", y no tener que estar pendiente de las nuevas entregas cada dos semanas. Además, creo que es mucho más fácil enganchar a un lector novel con un buen tochal de calidad de un sólo personaje, que no con pequeñas dosis (algunas de dudosa calidad) de muchos personajes, algunos de los cuales son totalmente desconocidos para el gran público, y no le interesan demasiado; no sólo eso, sino que puede sentirse fácilmente perdido. Es más, de hecho lo que la gente demanda son historias de los Iron Man, Thor, Capitán América o Vengadores, es decir, de aquellos que ya han podido ver en la gran pantalla.
Y respecto al precio, hoy en día a los chavales no les duele gastarse 70 euros en un videojuego, y todos sabemos en qué precios andan las películas, discos o libros de novedad, así que no creo que 40 euros por tomos de casi 800 páginas sea algo inalcanzable para el gran público... Y más cuando muchos de ellos acuden a este tipo de artículos para fechas señaladas como Navidades o cumpleaños.