Aun a riesgo de convertir el hilo en un monólogo, sigo con mi análisis diario. Hoy toca el
análisis del capítulo 3 de Vidas breves.
Portada:
- Agua: “Las personas que recuerdan la Atlántida”.
- Cuerpo atrapado: Bernie Capax. “Sobre mamuts y paredes que se derrumban”.
- Mapa: “Truth or consequences y otros lugares”.
- Ojo: Etain de la segunda mirada. “Voces ancestrales que profetizan”.
- Ala: “Cuando sueño, a veces recuerdo cómo volar”.
- Garra: el elemento habitual de las portadas. ¿Podría ser una referencia al Chamán?
Pág. 1: Viñeta 3. Una de las civilizaciones que precedieron a los grandes lagartos que se mencionan fue la de Nada, ex amante de Sueño. ¡Y viendo el collar que lleva Rex podría ser que la gente de Nada se dedicara a domesticar dinosaurios!
Pág. 2: Sobre el Marqués de Sade.
Como siempre seguro que hay millones de referencias, pero una me ha llamado la atención, cuando hablan del Marques de Sade como aquel que escribía las cosas que no se atrevía a realizar, como un cobarde con imaginación
Es curiosa la versión del Marqués “inofensivo” que Gaiman nos presenta aquí. Tengo entendido que está más que demostrado que ese personaje era un pieza de cuidado. Se le condenó repetidas veces por sus actos de violencia sexual. Incluso llegó a tener a prostitutas secuestradas varias semanas abusando sexualmente de ellas. Lo que sí podemos poner en duda es que fuera un caso aislado de la época. Es más que probable que en esa Francia decadente, la aristocracia abusara habitualmente de las clases bajas, tanto económicamente como sexualmente, y que el Marqués pagara el pato por el resto de la clase pudiente al carecer de la hipocresía habitual y hablar abiertamente de sus actos libidinosos.
Pág. 2: Viñeta 5. Bernie pasa por delante de un cartel premonitorio: “peligro de obras”.
Pág. 3: Las últimas palabras de Bernie son “Aún no...”. A pesar de haber vivido 15.000 años, aún considera que le falta tiempo por vivir. Por muy larga que sea la vida, una vida finita siempre será una vida breve.
Pág. 5: Aparición estelar de Muerte. ¡Me encanta! “Has vivido lo mismo que todo el mundo, Bernie. Toda una vida. Ni más. Ni menos. Toda una vida” Y fundido en negro.
Pág. 6: Sueño y Delirio están paseando por el puente O’Connell de Dublín, con el monumento a O’Connell al fondo. O’Connell fue quien consiguió emancipar a la iglesia católica en el Reino Unido, que dejara de depender de la protestante y que tuviera voz propia. Esto sentaría las bases de la posterior independencia de Irlanda.
Sorry but you are not allowed to view spoiler contents.
Pág. 7: Viñetas 4-6. Delirio no sería la misma sin estos diálogos de lo absurdo, son la llave que usa Gaiman para plasmar la personalidad de Delirio, y a la vez son uno de los puntos fuertes de este arco argumental. Este diálogo en concreto sobre los nombres es muy bueno.
“(Mi nombre) a veces no lo quiero ni yo, y eso que ya casi estoy acostumbrada”. Pág. 9: Esta escena, en la que nos introducen a Farrel, está narrada por un narrador externo y la página no tiene márgenes exteriores. Lo mismo pasará más adelante en la escena de Etain, que también está narrada externamente y sus páginas carecen de márgenes exteriores.
Pág. 13: Tanto el personaje de Etain como su apartamento son autorretratos de la dibujante Jill Thompson.
Pág. 17: ¡Destrucción está creando! O al menos lo intenta.
Cansado de destruir, ahora se dedica a construir mediante el arte. Pero está claro que siendo quien es, lo de crear no se le puede dar demasiado bien.
Pág. 19: En la galería de Destrucción, en vez de tener un espejo en el marco propio tiene su espada. Eso explica por qué están vacíos los marcos de Destrucción en las galerías del resto de eternos. Así se asegura que no puedan llamarlo desde las galerías.
Esa piscina en medio de la sala, es una cosa muy rara. Creo que debe haber alguna simbología oculta pero se me escapa.
Pág. 21: Viñetas 2-4. Jaque mate de Delirio a Sueño, teniendo en cuenta que Sueño considera que ningún eterno puede dejar de cumplir con sus tareas y que siempre se ha opuesto a que Destrucción abandonara sus obligaciones.
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Oh. No sabía que se podía dejar de ser un dios. -
Puedes dejar de ser cualquier cosa. -
¿Qué hay de nuestro… hum… hermano? Y Sueño con cara de “
¡Oh, mierda, me ha pillado!”
Pág. 21: Viñeta 6. “Mami va a empolvarse la nariz”, al parecer lo va a hacer tanto literal como figuradamente, ya que por la verborrea que tiene de repente mami en la página siguiente, todo apunta a que no ha dejado del todo la coca tal y como dice.
Pág 23: En esta página, tanto el diálogo entre Chloe y mami como el diálogo entre Chloe y Sueño son para enmarcar.
Los adultos tendemos a no explicar la verdad al 100% a los niños, por exceso de paternalismo pensando que no lo van a entender. Lo cierto es que cuando a un niño se le cuenta la verdad tal y como es, pasa a ser capaz de entrar en diálogos mucho más profundos.
Pág. 24: Las palabras que busca Delirio en distintos momentos a lo largo del arco, aunque parezcan palabras al azar no lo son. Son las ideas que guían sus actos.
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Hum. ¿Qué palabra se utiliza para llamar a las cosas que no son siempre lo mismo? Estoy segura de que hay una, ¿a que sí? -
Cambio. -
Oh. Me lo temía.