Pues ya que estamos divagando, he ido al tienda y he visto de reojo este tomo (Yermo en tpb, ¡Toma!) y me había parecido los Hidden Years de Byrne.
No iba muy desencaminado.
Pues ni idea de esto ¿Información please? Promete
Y bueno, por nuestra parte, cerramos serie:
Día 161: X-Men: The Hidden Years #22. Septiembre de 2001
Se acaban Los Años Perdidos de Byrne y Palmer con X-Men: The Hidden Years #22. Septiembre de 2001. La portada con la Patrulla despidiéndose hace que nos de pena que termine esta cabecera
Banda sonora: Vamos a ponernos un poco melancólicos. Rod Stewart se atreve en el 2007 con la inmortal "Have you ever seen the rain" de Creedence Clearwater Revival (1970) y sale bien librado. La Creedence, uno de los grupos con más versiones de la historia. Muy grandes
.
https://www.youtube.com/watch?v=2oX2FSv4Rys
Créditos: John Byrne (guion, dibujo, rotulación); Tom Palmer (tinta); Gregory Wright (color).
Portada de John Byrne.
Este número me ha sorprendido para ser el que pone el cierre de la colección de Los Años Perdidos. Porque, con tanto como había para resolver, Byrne se dedica gran parte del tebeo a recrear algunas viñetas de FF #104, a veces con las mismas palabras en los bocadillos de texto. Sin embargo, Byrne introduce algunas variaciones. Por ejemplo, en FF#104 Crystal al principio no tiene un papel relevante para contener a los atlantes que invaden el edificio Baxter. Pero aquí sí que la vemos utilizando sus poderes elementales. Y además, está el añadido de Xavier, metiendo cuchara con sus sugerencias y comentarios.
En general, y como ya se dijo, se construye una subtrama paralela donde, por retrocontinuidad, se intenta recontar la "verdadera" historia de FF#102-104 con escenas añadidas. Esto sin duda justifica haber leído en paralelo FF#102-104, algo que hay que agradecer a las recomendaciones de Kaulso
Las partes de trama que se relacionaban con La Promesa, se despachan en cambio bastante rápido, incluso con algunos momentos fuera de cámara. Avia, por ejemplo, se dice que volvió a la Tierra Salvaje después de enchocharse un tanto con Warren, y no se muestra nada.
Como ya contamos lo que pasó en FF #104, que cerraba el arco de la invasión de Magneto a NY, nos ahorraremos reiterar tramas que se repiten aquí y nos centraremos en lo nuevo que Byrne aporta. Como, por ejemplo, todo lo concerniente a la captura de los X-Men por el Hombre Topo. En realidad, tampoco es que esta parte de trama sea muy emocionante que digamos. Ya hemos contado como el Hombre Topo lleva ya dos o tres fugas de la Patrulla-X, nunca los acaba de rematar por alguna razón, y aquí ocurre otro tanto. Los lleva a un lugar donde acabará con ellos, esta vez de manera "refinitiva".
Sin embargo, la Bestia -oh, sorpresa- rompe las cadenas con las que estaba apresado por el Hombre Topo y, a partir de ahí, es cuestión de tiempo que los Hombres -y Mujer- X se vuelvan a escapar por enésima, comenzando otra refriega más bastante bostezable, las cosas como son
En el número anterior, Warren había sido dejado en las cercanías de la trifulca por un par de Eternos, aparentemente conformantes de alguna trama dejada inconclusa por la cancelación de la serie. Pues bueno, aquí simplemente se une a ayudar a sus compañeros y poco más.
Hay realmente poco que contar por aquí. La Patrulla-X escapa y, a consecuencia de uno de los disparos de Cíclope de sus rayos ópticos, se produce un derrumbamiento, muy oportuno para aislar al Hombre Topo de la Patrulla y dejar la cosa en tablas para otro día
.
Sin embargo, sí que me parece un puntazo que Byrne ahonde en los homenajes a los 4F, haciendo que, cuando la Patrulla-X escapa de los subterráneos, se encuentre en la isla en la que los 4F derrotaron por primera vez al Hombre Topo en FF#1
La parte de trama resuelta de la peor forma es, sin duda, la relativa a Kaos. Mediante las sugestiones mentales de Lucy, Kaos había acudido en ayuda de Xavier, a encontrarse con él en un parque, pero, cuando llega a ver la proyección astral de Xavier, todo ha acabado ya. Magneto está KO ya. Nada que hacer, oiga. Has venido para nada realmente, Alex.
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Así que, bueno, se vuelve a la base de la Promesa, para encontrarse con Lorna sana y salva. Oye, qué queréis que os diga, la vida real muchas veces tiene cosas de estas, donde sales de casa y te lo podías haber ahorrado
Muy realista Byrne
De vuelta en los HQ de La Promesa, nos encontramos con algún desgraciado accidente. Sin explicarse del todo muy bien por qué, Messenger ha fallecido, mientras el resto está sana y salva gracias a las ocurrencias de Xavier de acelerar el cronómetro de las cápsulas de dormir.
La Promesa se desbanda, sin un propósito claro, y descubriendo que, en el fondo, este Messenger era un poquito chapucero en la manera de llevar a cabo sus planes. Los miembros de la Promesa se van a vivir sus vidas en este presente y aquí paz y mañana gloria.
Queda por cerrar el temita amoroso entre Teri y Xavier. Este último vuelve a la mansión tras haber vigilado lo suficiente a Ash y ejem, a su madre. Al final, Xavier le espeta a Teri el típico "no eres tú, soy yo. No podré entregar mi curaçao por culpa de mi sueño de coexistencia y blablabla".
Sin embargo, no todo van a ser lágrimas. Esta entrega final cierra con la celebración del cumpleaños de Hank. Cíclope incluso cortará la tarta con sus rayos ópticos, en un claro homenaje a la Patrulla de Lee y Kirby. Buena manera de acabar
. Y además, con un guiño de Byrne al subtítulo mutante de "los adolescentes más extraños de todos los tiempos". Con Hank cumpliendo 20 años, definitivamente la Patrulla-X ha dejado de ser adolescente. Con ello, Byrne viene a justificar por qué, cuando se relanzó la cabecera, ya no se aludía a esta muletilla que ha sido usada prácticamente en todos los números de la etapa antigua de la Patrulla-X que ya hemos leído.
Y en fin, colorín colorado, este cuento se ha acabado. En realidad, no pues seguiremos muchos años más con nuestros queridos mutantes.
¿Veredicto final?
Pues, siendo sincero, diría, un tanto vulgarmente, que la serie "está guay". Pero poco más. Diría que es de esas series que se disfrutan cuando eres muy muy fan del mutantismo. No siendo así, te puedes ahorrar perfectamente estos 22 números. Con todo, y sin ser ninguna maravilla, a mí me ha merecido bastante la pena. Byrne trata con mucho cariño a la continuidad y a los personajes y, como para sintonizar con ese espíritu, hemos tenido a Palmer entintando prácticamente todos los episodios.
Un Palmer que nos dejaba hace muy poco, tristemente, por lo que estas reseñas, a cutres que sean, piensan sobre todo en la reivindicación del legado de este autor. Gracias por todo, artista.
Y nosotros seguiremos mañana con nuevas historias, que a esto le queda cuerda para rato.
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Tema: Crónicas Mutantes II: el Club de Lectura para Hijos del Átomo (Leído 104017 veces)