He leído La herencia de la ira, de Jason Aaron.
Un cómic parcialmente autobiográfico (ya conocía la historia por sus intros) de la familia Aaron.
El cómic me ha encantado. Le da un par de patadas en la boca al tipo de tebeo que Millar siempre quiere cerrar. Es una historia bastante jodida y bien contada con un par de cliffhangers cojonudos. El dibujo de Ron Garney es hipercojonudo, y el barbas acierta con el tono y los personajes para contar una sencilla historia de como la mierda se cala en la sangre.
Grandes frases, muy buenas caracterizaciones de personajes, funciona como un tiro.
Es una obra que solo merece halagos, y apenas tiene nada que chirríe. Bravo, la verdad.
Hiperrecomendado.
Puñetero Aaron. Qué fuerte está.