¡Muchas gracias, Eleder! Gracias a todos.
Pasaba por aquí para informaros que el Omnigold de la Patrulla X que tan gentilmente me han regalado la maravillosa gente de Whakoom ha llegado esta mañana.
En pluscuamperfectérrimo estado, envuelto en sobre de plastiquete de Correos color imitación de los antiguos sobres de papel, abrazado al amor de esas maravillosas pompitas que tanta felicidad nos produce aplastar y hasta la extenuación dejar sin oxígeno; protegido además por un transparente y delicado velo protector retractilado, impreso en níveo papel blanco como la nariz de un cantante Glam, con su Un-Ojo pequeñín y coquetón oteando desde el lomo al tiempo que baila una descompasada jiga sobre un número uno que promete que tras éste habrá más, promesa a su vez del futuro desvencijamiento de la estantería que tiene el honor de sostenerlo. Sin olvidarnos de su sellín de la autoridad Omnigold dándole marchamo de qualité al tiempo que sirve para diferenciarlo de la anterior edición y por último su tantas veces imitada portada donde la nueva generación rompe y rasga la cuarta pared asustando (¿tan feos eran, Gilkane?) a la vieja guardia sesentera.
Más bonito que un Sanluis.