Balada por un ataúd Si hace un par de reseñas hablaba de la calidad de una portada, aunque todas son bastante buenas, el título de esta entrega, junto a la del anterior, me parecen típicos de aquellas novelas del oeste que leía de niño y que se intercambiaban previo pago de 5 duros en los mercadillos del sábado en la plaza de abastos de la ciudad. Y es que si analizamos los títulos de los tomos que ya he comentado, o los que quedan por comentar, hay mucho de la esencia de los grandes espagueti western dirigido por Sergio Leone y protagonizado por el mismísimo Clint Eastwood. para que veáis lo conseguida que está esta serie en los detalles m´s insignificantes.
Finlay se dirige a Tacoma, pero antes deja un rastro que conduzca a los Mex al escondite en le que se encuentran el grupo de Blueberry. Una vez más, Mike parece estar dormido en una parra, porque será Chihuahua Pearl la que le exponga la cruda realidad: no pueden fiarse de Finlay, deben buscar el modo de ir a Tacoma.
Mientras, Trevor lleva a Finlay a la tumba en la que esperan encontrar el dinero, pero solo encuentran un cadáver. En ese momento, Trevor aprovecha la confusión para escapar, pero resulta herido. Aun así, parece que lo tenía todo pensado y recupera un arma que tenía escondida. Con ella en su poder, consigue disminuir el número de adversarios para, posteriormente, atrincherarse en la abandonada casa del alcalde. Desgraciadamente, Trevor no detecta la presencia de Lazarito, un indigente mexicano que lo mata a traición para apoderarse de sus botas, junto al resto de sus posesiones.
Tengo que reconocer que por un momento, todo esto me ha sorprendido, pero analizando el desarrollo de la trama desde el principio, esto se veía venir. De todas formas, esta predicibilidad no afecta al disfrute de la historia, porque todo está muy bien hilvanado. Además, tenemos un ritmo frenético a lo largo de todo el tomo, algo que consigue mantenerte totalmente absorto en la lectura.
Lazarito le roba un caballo a Finlay y huye de la desolada ciudad, mientras los sudistas descubren el cuerpo inerte de Trevor. A partir de ese momento, se quedan vigilantes a todo lo que irá sucediendo en Tacoma. Por otro lado, López y sus hombres descubren el escondite de Trevor y se internan en él. Nuestros protagonistas detectan la llegada de los Mex. Afortunadamente, Pearl conoce una salida secreta por la que consiguen escabullirse. A continuación, cogen desprevenidos a los que vigilaban los caballos de los mexicanos, los desarman y se apoderan de las monturas, dejándolos allí tirados. Parece que el destino de López es vagar por el desierto.
Libres de sus perseguidores, al menos de momento, se dirigen a Tacoma, pero por el camino se cruzan con Lazarito. Pearl vuelve a ser determinante, ya que se da cuenta que el mexicano lleva puestas las botas de Trevor. Lazarito intenta engañarlos, pero Pearl lo ha calado desde el primer momento y sospecha que es el asesino de su marido. El mexicano la considera un peligro para su supervivencia y le ataca. En el forcejeo acaba muerto. Cabe destacar que Chihuahua Pearl es responsable de muchas muertes en esta historia. Me parece que es un personaje mucho más representativo del salvaje oeste que nuestros protagonistas, los cuales siguen dejando cabos sueltos aquí y allá, debido a un complejo sentido del honor. A veces, la muerte tiene mucho más sentido, en mi opinión.
Con la muerte de Lazarito, todo parece perdido, pero Pearl les recuerda la confesión de Trevor antes de marchar. De este modo, acudimos a la bota derecha del muerto en la que se esconde una nota con el nombre de Arturo Leyba. Esa inscripción es la que deben buscar en el cementerio de Tacoma, auqnue primero darán sepultura a Trevor. En el entierro, asistimos a una escena en la que Blueberry golpea bruscamente a Pearl ante su falta de respeto hacia el muerto. Cuanto más cerca del tesoro se encuentran, más dura se vuelve la relación entre ambos, debido a la ambición de la joven por el oro. Quizá sea el aspecto mas explotado en toda la trama, la ambición humana y el egoísmo. Todos quieren hacerse ricos a cualquier precio y lo más rápido del mundo. Si lo pensamos bien, es un poco la filosofía que imperaba en los buscadores de otro de la época y el germen de ese sueño americano, donde todos tiene una gran oportunidad para prosperar en su vidas. Pues todo ello comenzó en el salvaje oeste y aquí tenemos un pequeño reflejo de aquel escenario.
Finalmente, a Blueberry se le ocurre mirar en la iglesia y allí encuentran a dichosa tumba. Por fin tenemos de vuelta al Blueberry ingenioso y, afortunadamente, esto no ha hecho más que empezar. Aunque tendremos una cal y otra de arena, eso sí. La tumba lleva a una cripta en la que se oculta un pesado y blindado ataúd en el que sospechamos que se encuentra el oro. No tienen herramientas para abrirlo y pesa demasiado, por lo que deciden dejarlo allí mientras van a buscar un carro para su transporte. Chihuahua Pearl deberá quedarse encerrada en la iglesia defendiendo el tesoro. Continúa el toma y daca de confianza entre ambos personajes.
Finlay y sus hombres salen de sus escondrijos e intentan disuadir a Pearl de que les dejen entrar. La respuesta llega en forma de bala y supone una nueva víctima a la larga lista eliminados por la joven. Su situación privilegiada le permite mantenerlos a raya, aunque no entiendo muy bien porque agota las municiones.
Mientras, Blueberry y sus amigos consiguen apoderarse de un carro. Se trata de la posesión de Hyeronimus, un doctor que vende un elixir que deja muchas víctimas entre los enfermos que pretende curar. Doc es salvado por Blueberry de la horca en el último instante. A cambio se apoderan de su carro y le llevan con él. El trato inicial es que recibirá mil dolares por sus servicios, pero la cosa se irá complicando y Doc irá aumentando la cuenta pendiente de forma progresiva.
A pesar de que no hay demasiado humor en esta saga, tenemos varias pinceladas incluidas con muy buen gusto, consiguiendo arrancarte una sonrisa en momentos puntuales.
En Tacoma, el asalto de Finlay es suspendido por la llegada de López y sus hombres, que sitian la iglesia con rapidez. Los sudistas vuelven a su papel de observadores en la sombra.
López supone un mayor peligro, ya que dirige un numeroso grupo de hombres, por lo que Pearl inicia una negociación. La joven traiciona rápidamente a Blueberry, manteniendo un seguro de vida, pese a que sabe que López no mantendrá su palabra. De esa forma, cuando llega Blueberry con el carro, vuelve a cambiar de bando y le abre las puertas para que entren en la iglesia, vehículo incluido. Así, pueden cargar fácilmente la pesada carga y se preparan para huir de la abarrotada Tacoma. Llega el turno al ingenio de Blueberry.
Gracias al cargamento de Doc fabrican bombas. Afuera, López se impacienta y prepara la artillería, es el momento perfecto para huir, llevando a cabo el plan urdido por Mike. Tras el cañonazo, se acercan los Mex, pero les caen varios barriles con explosivos. Entre la confusión, Red y Pearl abaten a los pocos que van entrando en la iglesia. A continuación, dos mulas salen disparadas con un explosivo cargamento, que mermará las filas de los hombres de López. Estos es una increíble carnicería. Destacar el impresionante dibujo de Giraud cuando explotan las mulas. ¡Increíble!
Ahora llega el momento de salir, mientras van eliminando a los pocos hombres de López que salen a su paso. Prácticamente eliminan a casi todos los mexicanos. López se reagrupa e intuye que Blueberry se dirige a la frontera por el camino más corto. El destino es la carretera de Presidio, allí se encuentra un destacamento de López con el que espera poder cerrarles el paso, mientras se lamen sus heridas y parten al lugar predicho. Los sudistas piensan de manera similar y establecen el río Conchos como el mejor lugar para interceptar a su objetivo. La persecución es una constante en esta historia, lo que contribuye a ese ritmo frenético que comentaba antes.
Los portadores del ataúd llegan a la posta de herrera, donde van a cambiar los caballos por otros de refresco para continuar su camino. El problema es que antes que ellos llega una diligencia y ya han hecho el cambio. Para rematar la situación, llegan los dos grupos del ejército mexicano liderado por López. Una vez más, la astucia de Blueberry los saca de la difícil situación. Primero cambian la carga a la diligencia, la cual es vaciada y secuestrada. Cambian un par de caballos en el carro de Doc y Blueberry monta otro caballo fresco dirigiendo el vehículo desde fuera. Mike sirve de señuelo, alejando a los mexicanos hacia unas montañas cercanas. Una vez se han perdido de vista, la diligencia parte hacia la frontera.
Cuando la distancia se acorta, Blueberry se quita de en medio y deja el carro de Doc que es una trampa explosiva que vuelve a reducir el número de hombre en las filas de los mexicanos liderados por López. El punto de reunión es un puente colgante. Blueberry consigue llegar y reunirse con sus amigos. López y su hombres consiguen acercarse, pero el puente ha sido boicoteado por Jimmy, de forma que no aguante el peso de sus perseguidores. Por ahora parece que tendrán un respiro.
Llegan a Coyame, donde pretenden subirse a la bala para cruzar el río. Allí se encuentra Vigo, le cual pretende saldar la cuenta pendiente con Blueberry. La rapidez de Chihuahua Pearl es determinante para que Mike no caiga en la trampa y consigan volver las tornas. Sigo pensando que Blueberry cae fácilmente en muchas emboscadas en esta saga. Eso sí, me gusta mucho el personaje de Chihuahua Pearl, a pesar de que se vuelve demasiado interesada con el paso de las páginas. Poco tiempo después, consiguen embarcar en la balsa con la que atravesarán el río Conchos, ahora con un nuevo viajero, que les permita llegar sanos a la frontera. Sin embargo, en la otra orilla les espera Finlay y los sudistas, por lo que acaban marchando río abajo dirección a río Grande y el regreso a su país. De nuevo la rapidez de gatillo de Pearl es vital para salir airosos del envite con los sudistas, aunque Doc acaba muerto, sin poder cobrar su deseada recompensa que ya ascendía a los cinco mil dolares.
El viaje por el río no es precisamente un paseo, ya que tendrán que pasar por unos rápidos que dificulta la navegación. Además, por ambos lados del río, les persiguen los sudistas y los mexicanos, aunque el temporal parece que afecta también a su perseguidores y acaba con la vida de López. Sinceramente, he revisado varias veces estas viñetas y no acabo de entender como muere el mexicano. Además, como no hay textos de apoyo, la cuestión se vuelve más confusa aún. No sé si es un fallo mío por no ser capaz de interpretarlo, o es un error de Giraud. Sea como sea, no me queda nada claro que sucede en esas cuatro o cinco viñetas.
Cuando llegan a tierra firma, el grupo se mantiene escondido, mientras que Blueberry se dirige al fuerte más cercano para telegrafiar a McPherson. Finlay está en un pueblo cercano y sigue buscando a Blueberry, lo que pone sobre aviso al cazarecompensas Donnegan. Parece que se habían olvidado de él, pero podemos ver que no es así. La cantidad de perseguidores de nuestro protagonista no puede decaer así como así.
Poco después, tras un dura búsqueda, los sudistas dan con Mike y lo acaban sorprendiendo.
Lo dicho, se ha abusado demasiado de esto en esta saga.
Pero lo importante de esta escena recae en una importante revelación. Finlay había mentido a sus hombres, los cuales creían que Mike les traicionó y no les consiguió la amnistía prometida tras su cooperación en una aventura anterior. Sin embargo, fue el propio Finlay el que destruyó el papel que les permitiría volver a su país, esto creará una fisura importante entre los sudistas.
Por cierto, a pesar del cambio de apariencia y tal, siempre me parecieron que eran los mismos personajes con los que se alió en México anteriormente, pero hasta que no se aclara este dato no estaba seguro del todo. Por lo tanto, tenemos la recuperación de un personaje utilizado hace tiempo, por lo que es muy importante seguir la cronología de la serie.
Como es obvio que Blueberry no va a delatar el paradero de sus compañeros, Finlay decide que solo tienen que seguir sus huellas y cuando todo parecía perdido, aparece Donnegan. El cazarecompensas los deja sin caballos y se lleva a Blueberry. Sigo sin entender porque no detiene a los sudistas, sino que los deja libres.
Blueberry intenta convencer a Donnegan de que su recompensa es falsa y forma parte de una misión encubierta para el gobierno. Como no le cree, vuelve las tornas a su favor y se marcha con sus amigos, dejándole encargado un mensaje para McPherson. Es curioso, porque Donnegan no cree nada, pero en esto le hace caso.
Al escondite llega un jinete vestido como Blueberry, esto despista a Jimmy y Red, que acaban cayendo en la trama de los sudistas. Ahora llega el momento de abrir la caja acorazada. Sinceramente, no sé como llegan a abrirla de esa forma tan rudimentaria. Quizá es uno de los detalles más descuidados que he visto a lo largo de la serie. En fin, si no pudieron abrir la caja antes, ahora con la culata de un rifle y poco más tampoco podrían, por mucha presión que tuvieran de los sudistas. La apertura del cofre conlleva al giro final, aunque en cierta forma era algo más o menos esperado. El ataúd no tiene oro, ya que se lo gastó Juarez en su guerra contra los franceses. Este era el secreto que Vigo quería guardar a toda costa, siguiendo ordenes de su gobierno. Con una serie de revelaciones, se cierra perfectamente el círculo de una trama que ha estado muy bien planeada desde el principio.
Con la aparición de Blueberry tiene lugar un tiroteo que da pro finalizada la aparición de los sudistas restantes.Ahora queda el delicado tema del dinero, ya que nadie va a creer a Blueberry con solo su declaración. Me quedo atónito cuando nadie acepta ayudarlo.
Entiendo que Chihuahua Pearl pase del tema, pero Red y Jimmy me dejan muy sorprendido. Además, la despedida es muy amarga, dando a entender que nunca más querrá verlos. Es cierto que no han tenido un papel muy destacable en esta saga, pero si nos dejaron buenos momentos en anteriores entregas.
Con Vigo llega a un acuerdo por honor militar, pero cuando llegan a Fort Davis, niega todo lo dicho por Blueberry, que acaba, en una corte marcial, condenado a treinta años en la penitenciaría de Francisville, tras ser expulsado del ejército por segunda vez.
Blueberry queda relegado a un simple forajido, auqnue tiene planes de fuga y una cuenta pendiente. Ya sabemos como suele solucionar eso nuestro protagonista.
Para terminar, me ha llamado la atención como esta saga lejos de tener un final más o menos cerrado, nos invita a leer su continuación que, seguramente tardaría como mínimo un año, dará comienzo a una nueva historia. Y a mí me ha dejado unas ganas tremendas de saber como continúa.