Hombre, sorprenderte, creo que es complicado, porque su baza no es la originalidad del concepto, pero creo que es otro ejemplo de escritor con oficio, capaz de transmitir las emociones de sus personajes, de trazar un buena historia y de construir buenos e interesantes personajes. Pero, sobre todo, te hace pasar un rato muy entretenido.
Va un poco en la línea de Joyland, aunque esa me gustó más por el pequeño toque de terror y por el carisma que desprenden los personajes.